La señal

Un hombre agoniza en la cama de un hospital cualquiera. Su hija, ante la proximidad del fatal desenlace, se acerca y llorando le susurra al oído: «envíame una señal y sabré que estás bien«. Desde el primer momento, lo único que le ayuda a mitigar su ausencia es contemplar la última foto en la que aparecen juntos y que todavía no ha tenido tiempo de enmarcar. Una noche, cuando la está mirando, se produce un pequeño fogonazo, seguido de una chispa y la foto comienza a arder. Hipnotizada, sin poder reaccionar, ve como el fuego prende las cortinas, después el papel pintado, la alfombra y apenas tiene tiempo de ponerse a salvo en la calle mientras la casa se quema hasta los cimientos. Cuando seis meses después, su madre enferma gravemente, ella le acaricia y le besa, le toma la mano y no la suelta hasta el final pero en todo este tiempo no le dice nada, ni siquiera abre la boca.

4 comentarios

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4 Respuestas a “La señal

  1. Sí, iñigo, los comentarios de Pedro, siempre te dejan un buen sabor de boca… vuelves a leer el micro ….y te preguntas ….¿esto lo he escrito yo?.

    Buen micro Iñigo, gracias a Dios no hizo lo mismo con su madre…
    Un saludo

  2. Hola Pedro:
    Realmente después de tu comentario uno vuelve a leer el micro y parece mejor y todo.
    Gracias.

  3. Todos tene mos deseos que es mejor que jamás se cumplan.

    Gran micro, esbozado con trazos de ironía y una excelente economía de lenguaje, que nos deja una historia con grandes dosis de acción sugerida.

    Un abrazo.

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